Tuesday, January 31, 2006

He soñado muchas cosas en mi estadia en otras provincias.
Desde peleas de bandas al estilo Gangs of Ney York, con Reznor liderando la banda que pierda su última pelea porque el lider ya no quiere pelear y necesita "irse", hasta historias secretas en una casa com jardines ocultos en la que cuando llueve se hacían hologramas gigantes, y había gente del gobierno que sospechaba que ese lugar que todos manteníamos oculto era mágico.
En ese sueno estaban isha y Fede y Mica y Filter y Barba. Cuando quería sacarle fotos al espectaculo del jardín-mar-holograma, y cómo de derretían los árboles y volvían a aparecer, tenía que ponerle a la cámara pilas con forma de frutita del color que estaba mirando, y filter me daba una bolsa llena para que probara. Luego todos teníamos que actuar como si fuesemos una gran familia cuando venian los del Gobierno, para que pensaran que sólo era una casa de familia con un gran jardín, entonces cada uno asumía un rol: vos sos la nona, vos sos el padre, vos sos el hijo, vos sos el tío alcoholico, etc. Terminaba escapandome en auto con mi padre y abandonandolo en la autopista para ir a visitar a mi prima, bajando por una escalera al costado de la autopista con escalones de cemento suspendidos en el aire. Luego bajaba al pasto por uno de los postes de luz arrancando con mi trasero los carteles de Freddy Storani postulandose para algun cargo politico.


Sueños muy extraños si una se pone a reflexionar. Soñe tambien que tenía sida, o mejor dicho que me decían que tenía sida. Y yo sabía que no era cierto, que estaba mal el diagnostico, que se habian equivocado de pastillita azul...y que lo que me decían que tenía era "sí, da", es decir, que sí, que tenía que dar [me] a algo o alguien.

Soñe hoy que vivía en una pensión, y que dos F me venían a visitar (dos amigos) y estaba prohibido que usaran el escritorio común que tenía la pensión. Entonces tenía que sacarlos a los chicos, y los tenía que levar a barrancas de belgrano, y dejarlos en un punto especifico. Los tenía de la mano, y ellos me decían que no los tenía que acompañar. Uno de los F me decía que estaba bien, y yo sabía que mentía, y el otro me decía que no estaba bien y yo sabía que no mentía. Los dejaba al costado de la vía. Cuando volvía caminando pensaba mi estrategia para calmar la situación en la casa donde estaba viviendo, por que habia algo raro que no me cerraba. Pasaba por un kiosco camino a la casa y quería comprar cigarrillos, y sólo tenía monedas que no alcanzaban. Entonces empezaba a aparecer plata escondida en la billetera. Llegaba a la casa y ya estaban todos despiertos, y me miraban raro. Entonces hablaba con el tipo que estaba a cargo de la casa y le decía que no sabía que nadie podía estar en la casa, y menos que no podian usar ese espacio común en particular. Y el me decía que la única manera de solucionar el inconveniente era peleando con ellos.

--Vas a tener que pelear
-- Contra todos uds?
-- Sí.
-- Entonces pelearemos.

Las peleas eran virtuales, pero no estrictamente. Eran al estilo evangelion, y mi eva era azul.
Ahí me despertó mi madre.

En fin.

Sunday, January 08, 2006

Es tan extraño para mi soñar con él. Tan extraño que todavía no sé si he soñado eso, ni qué significa.
Él estaba siendo perseguido por espiritus malignos, y yo volvía a su vida de casualidad. Pensaba que durmiendo en la misma cama que yo él iba a poder descansar. Como lo perseguían no podía dormir...estaba cansado y enojado. Aceptaba dormir conmigo y hasta me daba un beso. Yo tenía miedo de que ella apareciera. Tanto miedo que ella apareció. Y cuando él tuvo que elegir volvió a elegirla a ella. Escribía para él una serie de palabras curadoras en la pared blanca, para que durmiera cuidada por mis palabras. Cuando me despertaba, él se había ido a la otra cama. Yo me iba a seguir mi vida, pasaba más tarde ese mismo día y mis palabras ya no estaban. Preguntaba quien las había borrado, N me contestaba "el amigo enano del grupo", yo le preguntaba por qué, y N decía "por qué todavía no". Le preguntaba a ella si él había podido dormir, y me decía que un poco. Yo me tomaba el subte para volver a mi realidad, y me cruzaba con A...como si fueramos grandes amigos nos sentabamos a tomar un café mientras esperabamos el horario de nuestros. Discutíamos con las personas de otras mesas sobre la malignidad de los espíritus que acechaban a mi amigo. Entendía que no tenía la fuerza necesaria para cuidarlo de nadie ni nada. Y que ella, por el contrario, sí.

Nada ha cambiado. Desde que soy adolescente quiero su corazón. Nunca lo pude tener demasiado tiempo entre las manos. Por lo menos en sueños le volví a dar un beso y a preocuparme por él. Cosa que en la realidad lejos está de ser posible.

At least.